Darío Menna " Cristina No está sola, está con su pueblo"

Desde Río Turbio, quiero expresar mi total adhesión y acompañamiento a la declaración del Consejo Provincial del Partido Justicialista de Santa Cruz, que convoca a un estado de Alerta y Movilización frente a la persecución política, mediática y judicial contra la compañera Cristina Fernández de Kirchner.

Como militante del proyecto nacional y popular, como intendente elegido por el voto de mi pueblo, y como hijo de una historia de luchas, no puedo permanecer en silencio frente a esta ofensiva que no sólo busca encarcelar a una dirigente, sino deslegitimar al peronismo, condenar la memoria de los gobiernos populares y disciplinar al conjunto del pueblo argentino.

Cristina no es solo una ex presidenta. Es la síntesis de una esperanza colectiva, la voz de millones de argentinos y argentinas que en los últimos años recuperaron derechos, dignidad, soberanía y futuro. Por eso la atacan. Porque no negocia sus convicciones, porque no se arrodilla ante los poderes fácticos, porque no traiciona.

La persecución que sufre Cristina no es un hecho aislado. Forma parte de una estrategia más amplia: el lawfare. Un dispositivo que combina medios de comunicación concentrados, operadores judiciales y sectores del poder económico para eliminar a quienes defienden los intereses del pueblo. Lo hicieron con Lula en Brasil. Lo intentan hacer con Evo. Lo hacen con Cristina.

Como peronistas, como hombres y mujeres del campo nacional y popular, no podemos ser espectadores. Nos interpela una causa mayor: la defensa de la democracia, la justicia social y el derecho del pueblo a elegir libremente a sus representantes. Hoy más que nunca, como decía Evita, “donde hay una necesidad, nace un derecho”. Y el derecho a vivir en una patria libre, justa y soberana está siendo vulnerado.

Desde Río Turbio, tierra de trabajadores, de carbón y de memoria, abrazamos la convocatoria a la movilización. Llamamos a cada compañera y compañero a organizarse, a debatir, a marchar, a defender lo que somos. Porque cuando tocan a Cristina, nos tocan a todos.

No es tiempo de tibiezas. Es tiempo de compromiso, de unidad y de coraje político.

Cristina no está sola. Está con su pueblo.